Miguel Ángel Silva es un apasionado por el piano. Pero también por la física, por la música, por la naturaleza y por conocer diferentes culturas. Cuando era niño soñaba con ser un gran investigador y ayudar a la humanidad de cualquier forma. Quiso ser paleontólogo y tratar de descubrir especies del pasado, luego quiso ser médico. Pero desde hace 4 años de su objetivo se centró en la ciencia y en la física soñando con ayudar a entender el funcionamiento de la naturaleza de este planeta.
En el último año de bachillerato en la Institución Educativa Lucrecio Jaramillo en Medellín gracias a una amiga conoció a Colegios del Mundo Unido. Se enamoró de este movimiento y decidió postularse.
Miguel define Colegios del Mundo Unido (UWC) como “un movimiento global que hace de la educación una fuerza para unir a las personas, las naciones y las culturas por la paz y un futuro sostenible inspirando a los jóvenes para que pongan su talento y energía al servicio del cambio social”.
La UWC es una organización sin ánimo de lucro que contribuye a mejorar las oportunidades educativas de jóvenes de Colombia mediante la adjudicación de becas y cupos en entidades educativas internacionales del movimiento, diferentes a la Asociación y a través de actividades que promuevan y faciliten el acceso de estos jóvenes a educación de calidad.
Ingresar allí no es tan sencillo. Requiere esfuerzo, dedicación y muchas ganas de cambiar el mundo. El proceso de selección incluye escritura de ensayos, recolección de notas, cartas de recomendación, formularios, entrevistas y análisis y viabilidad de un proyecto que previamente debía presentar. Al final de esta fase debía asistir al campamento UWC en Bogotá donde entendió más la experiencia y las formas de evaluación. El final fue una evaluación sicológica que cerraba el proceso de la convocatoria. Miguel Angel pasó todos los filtros y Colegios del Mundo Unido buscó a Fraternidad Medellín para que apoyara sus estudios.
Actualmente, Miguel cursa el grado 12 de bachillerato internacional en la República de Armenia (Asia). Define esta experiencia no solo como una gran posibilidad de adquirir conocimiento. También es la mejor oportunidad de conocer personas, culturas, formas de actuar y de pensar en un espacio donde el respeto y el entendimiento intercultural es el centro de las conexiones humanas.
En Fraternidad Medellín celebramos la perseverancia de Miguel Ángel y de los 5 becarios más que han pasado por UWC. Cada pequeña acción que han realizado por su evolución, cada noche de estudio y cada uno de los esfuerzos y los de sus familias hoy los tienen donde están. Son ciudadanos del mundo que replican el poder de la Fraternidad.