Para Fraternidad Medellín, la educación es el pilar fundamental para el progreso y el avance de los individuos y de la sociedad. Bajo este concepto, el Programa de Becas de Educación Superior, creado hace ya siete años, se ha convertido en uno de nuestros más grandes orgullos.

Un ejemplo de este impacto es Catherine Muñoz, quien fue estudiante de la Institución Educativa Madre María Mazzarello. Al terminar su bachillerato, gracias a la información que recibió de la rectora, conoció el programa de becas de Fraternidad. Motivada por su deseo de continuar sus estudios, Catherine decidió postularse y, poco después, recibió la noticia de que había sido seleccionada como beneficiaria de una de nuestras becas.

Con el apoyo de la beca, Catherine estudió Atención Prehospitalaria en la Universidad Adventista. A pesar de las dificultades que enfrentó —como la alta exigencia académica de su carrera y la necesidad de cumplir con responsabilidades familiares y laborales—, nunca se rindió. Siempre buscaba apoyo en Fraternidad y, con paciencia y determinación, logró graduarse en plena pandemia.

Hoy en día, Catherine trabaja como paramédico en Bomberos Medellín, atendiendo emergencias que requieren servicios de ambulancia. Cuando le preguntamos qué significa Fraternidad para ella, responde sin titubear que fue su salvación. Gracias a la Fundación, ahora es ella quien salva vidas.

Hace un mes, Catherine logró otro hito importante al graduarse como Técnica Laboral en Bomberos, y su sed de conocimiento no se detiene. El Programa de Becas de Educación Superior no solo le abrió la puerta a su carrera, sino que también le enseñó que los sueños se pueden hacer realidad con coraje, ganas y, sobre todo, con el apoyo de manos amigas dispuestas a ayudar.